1.- Tlayacapan, Morelos
Distancia de la Ciudad de México: 97 KM
Si decides escaparte, incluso en un fin de semana cualquiera, Tlayacapan es una excelente opción, ya que se encuentra a tan solo 10 minutos de Oaxtepec en Morelos. Uno de sus principales atractivos es su arquitectura, su nombre proviene del náhuatl y significa “sobre la punta de la tierra” o “la nariz de la tierra”.
Los lugares que puedes visitar en este tradicional y mágico lugar son: el Convento de San Juan Bautista que data del siglo XVI, mismo que se encuentra en el centro y es considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad de acuerdo con la UNESCO. También, cuenta con un museo ubicado en la sacristía del convento, donde se exhiben algunas momias.
Por otro lado, no puedes dejar de probar la comida típica del lugar, que es el mole verde de pipián (pepita), con tamales de ceniza, charales y frijoles blancos.
El lugar cuenta con hoteles y diversos tipos de hospedaje que se ajustan al presupuesto de cualquier bolsillo.
2.- Huasca de Ocampo, Hidalgo
Distancia de la Ciudad de México: 138 KM
Este es tal vez uno de los pueblos mágicos menos reconocido en el imaginario de los mexicanos, sin embargo, es considerado uno de los pueblos mas hermosos de todo el país, esto porque data de la época cuando se edificaron haciendas que convirtieron al Conde de Regla en el hombre mas rico de su época; mismas que ahora se han convertido en los principales escenarios de este colonial y pintoresco pueblo, rodeado de bosques y barrancas.
Además de la arquitectura del lugar, también podrás disfrutar de los Prismas Basálticos, mismos que se pueden ver desde los jardines de la ex hacienda principal, compuestas por columnas geométricas de basalto, ubicadas al pie de una barranca bañada por las aguas de la presa San Antonio.
Podrás encontrar una infinidad de actividades y seguramente te enamorarás de este pueblo mágico.
3.- El Oro, Estado de México
Distancia de la Ciudad de México: 170 KM
Este pueblo tiene una impresionante historia minera, y también ofrece diversas actividades para los amantes de la naturaleza, fundado en el siglo XVIII, creció gracias a la fama de minas como La Esperanza, El Consuelo, o La Providencia.
La grandeza de este pueblo gracias a la industria minera atrajo a personas de todo el mundo, en particular a las compañías inglesas.
Por eso podrás encontrar construcciones de casi todos los estilos arquitectónicos europeos de la época, como el Teatro Juárez y el Palacio Municipal que destacan por su decoración y estilos art nouveau y neoclásico.
También podrás encontrar una pintoresca estación de trenes, inaugurada en 1889. Los alrededores están enmarcados por frondosos bosques en donde podrás ubicar dos preses, además de uno de los santuarios de la mariposa monarca.
Así que ya lo sabes, planéalo o date una escapada de fin de semana, y recorre en tu moto estos bellos pueblos mágicos que se encuentran a menos de 200 KM.
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