El anuncio de Toyota se suma a los de Ford y FCA, que dieron a conocer grandes inversiones en el país después de una agresiva campaña del presidente electo Donald Trump, quien presionó por más puestos de trabajo para la industria en Estados Unidos.
En las últimas semanas Trump utilizó Twitter para criticar a empresas automotrices que deslocalizan puestos de trabajo en el extranjero, especialmente en México, y amenazó con la imposición de aranceles aduaneros por producir en ese país, donde los salarios son más bajos, e importar después los vehículos a Estados Unidos.
Según el reporte de la agencia japonesa Kyodo, el anuncio de Toyoda sobre otros 10,000 millones de dólares no debe ser visto como una reacción a las declaraciones de Trump, sino que más bien forma parte de la estrategia empresarial.