Se trata de un raro modelo del que sólo se fabricaron 39 ejemplares. No obstante, pese a la elevada cifra alcanzada el jueves los expertos esperaban una suma de hasta 50 millones de dólares.
El Ferrari participó en numerosas carreras. Uno de sus pilotos perdió la vida en un accidente y el auto tuvo que ser reparado al completo. Fue adquirido en 1965 y desde entonces estaba en propiedad de la misma familia.