Entre abril y septiembre de 2011, el gigante automovilístico indio obtuvo unos ingresos de 694,860 millones de rupias (unos 13,800 millones de dólares), un 25.4 por ciento más que en el primer semestre del ejercicio fiscal anterior.
Según un comunicado del fabricante indio, las ventas de Tata Motors experimentaron en este tramo un repunte del 2.8 por ciento y se situaron en las 409,006 unidades, la mayor parte de ellas en el mercado local (243,312), donde el grupo tiene una cuota del 60 por ciento.
De acuerdo con el comunicado, las ventas de Jaguar y Land Rover, marcas filiales de Tata, alcanzaron las 130,090 unidades en el pasado semestre, un aumento del 13.8 por ciento, gracias sobre todo al buen rendimiento de ambas firmas en los mercados chino y ruso.