Las marcas francesas incrementaron un 5.9 por ciento sus ventas con 103,942 automóviles, gracias al incremento de Peugeot (13.7 por ciento con 34,733) y de Citroen (8.4 por ciento con 28,079), que compensaron el retroceso de Renault (1.4 por ciento con 41,120).
Entre las extranjeras, los mayores incrementos en términos relativos fueron los de Hyundai (49.7 por ciento con 4,247 automóviles), General Motors (42.9 por ciento con 9,670) y Nissan (33 por ciento con 4,536).
También tuvieron incrementos significativos Suzuki (15.8 por ciento con 2.,15), Fiat (11.4 por ciento con 7,480), el grupo Volkswagen (9.3 por ciento con 18,743) o Mercedes (8.5 por ciento con 3,327).
En el otro extremo, Toyota Lexus sufrió un retroceso del 7.4 por ciento con 6,260 vehículos particulares.
Las ventas de utilitarios ligeros se incrementó un 8.6 por ciento en Francia en enero hasta 33,587, mientras las de vehículos comerciales se disparó un 56.9 por ciento con 3,942.
En enero se vendieron coches que se habían encargado en los últimos días de diciembre, y que por lo tanto todavía se pudieron beneficiar de la prima al reciclaje, definitivamente extinguida en 2010.