"Prometemos a todo el mundo que os ofreceremos un apoyo máximo, tanto en el plano como en otros planos", dijo Peeters en unas declaraciones que ofreció a las puertas de la factoría en cuestión, y que recoge la agencia de noticias Belga.
Peeters y otros representantes del gobierno regional flamenco se habían reunido previamente con representantes de los trabajadores afectados.
El presidente flamenco también evocó el debate que vendrá a continuación sobre la adquisición y reasignación de los terrenos, y en ese sentido alegó que su objetivo es que se utilicen para crear empleo.
"El Gobierno flamenco estará de vuestro lado. No estaréis solos", enfatizó, y manifestó su comprensión con la cólera que sienten los trabajadores que perderán sus empleos.
"Es un drama social", indicó.
La Comisión Europea también manifestó hoy que está preparada para discutir con las autoridades belgas qué tipos de ayudas pueden ofrecer a estas personas despedidas, que pueden partir del Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización (FEAG)", el Fondo Social Europeo (FSE) o fondos regionales.
Por su parte, el primer ministro belga, Elio Di Rupo, anunció el jueves que el gobierno federal dará "una respuesta excepcional" a la decisión de Ford Europa de cerrar la planta de Genk para llevar parte de su producción a Valencia (este de España).
El plan anunciado por Ford contempla llevar la producción de la próxima generación del Mondeo, del S-MAX y del Galaxy a su planta en Valencia, en tanto que tiene pendiente la decisión sobre la fabricación del C-MAX y del Grand C-MAX -vehículos compactos multiuso-, que puede ser trasladada de esa planta española a la de Saarlouis (Alemania) en 2014.