"A Honda y a todas las fábricas automotrices les incumbe una responsabilidad en materia de seguridad que deben asumir. No existen excusas", subrayó el secretario de Transporte Anthony Foxx en un comunicado.
La automotriz deberá abonar 70 millones de dólares (aprox. 59 millones de euros), cifra récord para la japonesa.
"Estas multas reflejan nuestra posutra tajante hacia quienes violan la ley", destacó Foxx.
La NHTSA sólo está autorizada a imponer penas de un máximo de 35 millones de dólares. Sin embargo, Honda deberá abonar el doble por no haber reportado correctamente 1,729 casos de muerte y de lesiones en sus informes regulares de prevención, además de haber cometido errores en las cifras de demandas de indemnización presentadas por sus clientes.
"Hemos acabado con este asunto y daremos continuidad al importante trabajo emprendido por Honda a raíz de esta negligencia", aseguró por su parte el vicepresidente de Honda en Estados Unidos, Rick Schostek.