Como cada año, la iniciativa Global Month of Caring reclutó a héroes locales distinguidos por su vocación por el servicio y ansias de mejorar su entorno. En México, un total de 652 empleados colaboraron con alrededor de 4500 horas de servicio en actividades como reforestación, rehabilitación de casas hogar y refugios de perros, comedores comunitarios, técnicas de Ecotecnias y viviendas emergentes, entre otras, a lo largo de la República.
Tan sólo en Santa Fe, 441 empleados de Ford de México y Ford Credit, formaron parte de las actividades, participando en la mejora del albergue para perros Propet, la reforestación de 1,200 árboles en el Nevado de Toluca, mejoras físicas para el albergue Casa Hogar Ser Humano que atiende a niños huérfanos con VIH-SIDA, al igual que comedores comunitarios a las afueras de hospitales públicos.
“Participar en este tipo de actividades rinde frutos inmediatos, los niños que te regalan sonrisas de agradecimiento, los perritos que se emocionan con nuestra visita y saber que fuiste parte del comienzo de vida de un árbol al ser plantado son motivadores suficientes para todos en Ford” señaló Karem Rojas, Coordinadora de Responsabilidad Social de la compañía.
El consejo directivo de la compañía en México también se unió a las actividades para la realización de Ecotecnias en la comunidad de Piedra Grande en Huixquilucan, donde enseñaron a las familias a crear huertos a partir de llantas reutilizadas, deshidratadores solares y cisternas de captación de agua de lluvia, todo con el fin de crear una comunidad sustentable.
“Estas actividades de servicio a la comunidad son un gran motivador, es importante que, de mano de cada uno de nuestros empleados, llenemos de espíritu a la compañía” señaló Gabriel López, presidente y CEO de Ford de México. “Cada acción que tomamos en la compañía, debe considerar un beneficio real para nuestras comunidades”, concluyó.
La planta de Ford en Chihuahua ejecutó actividades en la Casa Hogar Refugio de Amor, Asilo Rincón de Amor y en la Escuela Primaria Benemérito de las América, donde se recolectaron víveres, se restauraron instalaciones y se reforestaron las áreas comunes respectivamente. Por su parte, la planta de Ford en Irapuato dedicó sus esfuerzos a restaurar y habilitar áreas verdes en escuelas Ford de ese estado.
En el Estado de México, los empleados de la planta de Cuautitlán reforestaron el parque Alameda Bicentenario, realizaron trabajo comunitario en escuelas primarias de mano de FADEM, ONG que apoya al desarrollo de jóvenes y adultos con discapacidad intelectual al igual que apoyaron la construcción de viviendas emergentes con la ONG, TECHO.
De la misma manera, la planta de transmisiones de Ford en Irapuato, contribuyó al mes de beneficencia de Ford con la restauración del Hogar para niñas Casa de Jesús, en Guanajuato, donde se benefició a más de 100 personas entre niñas residentes y personal de atención. La comunidad El Comedero, se benefició con la construcción de estufas y corrales para sus habitantes. Los empleados y sus familias también tuvieron la oportunidad de unirse a la reforestación del Parque Ecológico de Irapuato.
Estas iniciativas se llevaron a cabo gracias a la colaboración de Global Giving, ONG que trabaja con Ford Fund a nivel global, y de las aportaciones mensuales que realizan los empleados de Ford de México a través de los grupos Líderes Contribuyendo y Seres Humanos.
Acciones como estas forman parte del espíritu de la compañía por beneficiar a los sectores menos afortunados del país; un vivo ejemplo de esto es el proyecto educativo del Comité Cívico de Ford y sus Distribuidores, que este año celebra 50 años de trabajo continuo en pro de nuestra niñez mexicana con su proyecto presente en 194 escuelas primarias públicas denominado “Educación en Movimiento”.