La empresa, que cotiza en la Bolsa de Hong Kong, exportó 55,000 vehículos el pasado año, logrando por estas ventas ingresos de 453 millones de dólares, un aumento del 60 por ciento con respecto a 2009.
La firma con sede en la provincia de Hebei (norte del país) logró un aumento mayor que la media en el país asiático, ya que según la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China el crecimiento nacional del sector en 2010 fue de un 34 por ciento, consolidando el mercado asiático como el mayor del mundo.
Para 2011, Great Wall se ha fijado un crecimiento de ventas del 34 por ciento, hasta las 550,000 unidades, de las que unas 70,000 serían destinadas a la exportación.
Sin embargo, reconocieron los responsables de la marca, habrá que hacer frente a desafíos como las leyes para limitar el tráfico en Pekín, donde las autoridades municipales ordenaron que este año haya tres veces menos ventas que en 2010, con el fin de resolver los graves problemas de circulación de la ciudad.
Otras localidades chinas con problemas de congestión vial, como Cantón (sur) y Chongqing (centro), podrían seguir el ejemplo pequinés, lo que podría ser perjudicial para el sector, admitió Shang Yugui, subdirector de ventas de Great Wall.