El término ‘activo’ indica claramente cómo funciona un sistema que, desde el momento en que se pone el coche en marcha, realiza una rotación de los faros, una especie de saludo y una demostración de que el DS 9 E-Tense está cobrando vida.
Los LED rotativos son los responsables de esta danza luminosa, pero, al margen del apartado estético, con el encendido del sistema DS Active LED Vision entra en juego el haz luminoso adaptativo que se adecúa a las condiciones de la calzada y de la velocidad del coche.
Cinco modos, que se activan automáticamente, permiten afrontar diferentes circunstancias de conducción.
El primero de esos modos está pensado para las maniobras de aparcamiento y se denomina Parking. El modo de circulación en ciudad es el Town Beam que ensancha el haz de luz a los cinco segundos de iniciarse la conducción.
Fuera de ciudad, se activa el modo Country Beam que se centra en la iluminación de la carretera por encima de 50 km/h de velocidad.
Cuando se superan los 110 km/h se pasa al modo Motorway Beam, con una mayor potencia luminosa para la conducción en autopista.
En situaciones meteorológicas adversas se activa el modo Adverse Weather que incrementa la potencia de los módulos secundarios al mismo tiempo que reduce la intensidad de los faros principales.
A todas estas modalidades se añaden los faros activos direccionales Dynamic Bending Light y las luces largas High Beam para un mayor aumento de la eficacia en términos de luminosidad.
La mejor seguridad de una carretera más iluminada, con más profundidad y con un haz de luz más ancho, añade todavía más valor a la experiencia de conducción que ofrece DS 9 E-Tense.
Por otro lado, el savoir-faire de DS Automobiles mantiene la combinación de diseño de vanguardia y tecnologías de seguridad con un enfoque del que DS 9 E-Tensees el perfecto portaestandarte.