Así nace el Cupra UrbanRebel Concept, un modelo inspirado en el mundo de la competencia que muestra la interpretación más radical de un coche eléctrico urbano. ¿Cómo ha sido este reto para el equipo de diseño? Jorge Diez, director de Diseño de Cupra, cuenta cómo han llegado a su versión más rebelde para la era eléctrica.
¿Cómo nace la idea de crear el Cupra UrbanRebel Concept?
Lo primero que hicimos fue, teniendo en cuenta la filosofía de la marca, decidir en qué pilares queríamos que se basara el diseño de Cupra. Y todos estos pilares los hemos adaptado a este modelo, que es una versión mucho más radical, más expresiva. Siempre intentamos hacer esta apuesta visionaria, de la que luego recogeremos la esencia en el futuro vehículo eléctrico urbano, que será lanzado en 2025.
Además del mundo de la competencia ¿qué os ha inspirado?
Al equipo de diseño también le inspiró la Generación Z, una generación altamente gamificada. Si planteas un proyecto visionario debes conocer cómo será la gente que lo disfrutará. El diseño que perfilaron desde el principio era altamente digital. En paralelo a este diseño tan transgresor, el equipo de Color&Trim ha realizado un cambio radical en la estética de la marca influido por esos videojuegos. Por eso los colores son más ácidos. Tras cientos de pruebas incorporaron colores violetas, amarillos flúor, y gráficos que nos recuerdan totalmente a los píxeles de los videojuegos. También nos hemos inspiramos en la parte humana, en mirar al futuro. Un ejemplo es la línea lateral que está en posición dinámica y que apunta hacia delante. El coche, por ejemplo, tampoco tiene ventana trasera, porque en nuestra filosofía adaptada al diseño miramos siempre hacia delante.
¿Qué elementos son los más característicos del concept?
Cada detalle del coche habla de la evolución de lenguaje de Cupra, pero hay un elemento del que hemos conseguido llevar su simplicidad a los límites del diseño. Algo tan sencillo como un triángulo, que es la base del icono de Cupra, aparece reflejado en diferentes partes: la nueva mirada con los faros triangulares formados por otros tres, el diseño de las luces traseras, las líneas laterales que convergen en un punto… hay muchos triángulos deconstruidos. Lo decidimos así desde los primeros trazados en papel, porque las formas puras son mucho más fáciles de recordar, como también lo son un cuadrado o un círculo. Ya las aprendemos en la infancia. Hemos escogido el triángulo porque es la forma más dinámica y puede tener dirección, siempre hacia delante.
Y ¿qué destacarías del Cupra UrbanRebel Concept?
A mí me gusta la actitud del vehículo, más que destacar una parte concreta. El rol es lo que hace al vehículo, esa actitud que tiene. Es atractivo, tiene esa actitud que lo transforma todo: esa decisión, esa condición de querer cambiar algo, te enamora. Y es lo que hacemos en Cupra.
¿Qué mensaje quieren dar con este prototipo?
El mensaje es que los coches eléctricos pueden ser altamente emocionales, que la vida es emoción y que hay que disfrutarla día a día. Por eso, queríamos concentrar toda la esencia de Cupra en un formato compacto de poco más de 4 metros, su esencia y pilares unidos en un solo objeto a modo de manifiesto. Es la primera vez que un modelo tan compacto se desarrolla de manera tan deportiva, porque nosotros pensamos que estando en la ciudad también te tienes que divertir conduciendo. En Cupra creemos que incluso en proporciones de cuatro metros se puede desarrollar esa emocionalidad. La emoción que transmite el vehículo es lo que más nos gusta. Hacemos coches para que la gente no se quede indiferente, queremos ser transgresores, incluso aunque suponga que no a todo el mundo le guste. Hemos intentado subir al máximo el volumen de las emociones.