Con esta unidad, Audi posee ahora tres de los cinco Auto Union de carreras que pueden presumir de ser originales, lo cuál es considerado de gran importancia en la conservación del patrimonio de Audi.
La leyenda de los Flechas de Plata (Silver Arrow) nació en 1934, cuando Auto Union y Mercedes-Benz aparecieron en la competición automovilística internacional con sus respectivos vehículos de carreras luciendo un diseño revolucionario, con aspecto futurista y un acabado plateado.
Consiguieron un éxito inmediato y mientras que Mercedes-Benz siguió confiando en la arquitectura convencional con el motor situado en posición delantera, Auto Union optó por una configuración de motor situado detrás del conductor, un diseño que sigue siendo un rasgo común característico en los monoplazas de Fórmula Uno de hoy.
Los dos fabricantes alemanes dominaron sin oposición las carreras en los circuitos de Grand Prix en Europa, hasta el estallido de la Segunda Guerra Mundial.
Los coches de carreras con motores de 12 y 16 cilindros de Zwickau y Stuttgart se adjudicaban un triunfo tras otro con gran facilidad, casi como si no hubiera mas coches compitiendo.
Pilotos como Bernd Rosemeyer, Tazio Nuvolari y Hans Stuck (Auto Union), Rudolf Caracciola, Manfred von Brauchtisch y Hermann Lang (Mercedes-Benz), que a menudo alcanzaban velocidades de más de 300 km/h en carreras desprovistas de medidas importantes de seguridad, todavía son reconocidos como auténticos héroes por los entusiastas del deporte del motor.
En las largas rectas del circuito Avus en Berlín, en 1937, el coche de Rosemayer registró una velocidad máxima de 380 km/h.
La Segunda Guerra Mundial supuso el repentino final de lo que había llegado a definirse como "la era de la sobrealimentación".
Mercedes-Benz consiguió rescatar casi todos sus Flechas de Plata tras el desmoronamiento total de Alemania, pero el destino no fue tan condescendiente con Auto Union, ya que Zwickau, sede de Auto Union, fue ocupada por el ejército soviético, y el fabricante alemán de automóviles fue liquidado y sus fábricas cerradas.
Las fuerzas de ocupación rusas encontraron las Flechas de Plata de Auto Unión y las trasladaron a la Unión Soviética como parte del pago por indemnización que le correspondía a Alemania, y en un país tan grande, rápidamente se perdió su rastro.
De esta forma, los vehículos que mejor podían rendir homenaje al patrimonio de Auto Union en el mundo de la competición automovilística se consideraron perdidos de forma irremediable cuando la nueva Auto Union (en la actualidad Audi) se estableció en Ingolstadt en 1949.
A finales de los años 70 se escucharon los primeros rumores acerca de la localización de uno de los Auto Union de carreras perdidos en la antigua URSS.
Paul Karassik, un coleccionista estadounidense de vehículos clásicos de alta gama, se trasladó a Europa y procedió a la búsqueda del coche. Le llevó diez años y numerosas visitas a la URSS localizar los restos de dos Auto Union desmantelados en Rusia y Ucrania, que logró recuperar y restaurar.
En la primavera de 2000, Karassik vendió el coche a un coleccionista privado, y ahora, tras adquirir el Type D "Twin Superchargued", Audi ya ha recuperado tres de los Auto Union de carreras perdidos en lo que antes era la Unión Soviética.
La nueva adquisición de Audi realizará su aparición en el Goodwood Revival, en Inglaterra, que tendrá lugar del 14 al 16 de septiembre.