Al igual que en las rondas anteriores, en esta reunión participará también el comisario de Energía de la Unión Europea, Günther Oettinger.
El objetivo del encuentro es "continuar con las conversaciones", según informó la Comisión Europea en Bruselas. Se busca una solucion para "un suministro estable". Kupriyanov, por su parte, subrayó que Rusia está dispuesta a llegar a "arreglos", aunque también matizó: "no nos vamos a dejar presionar", según recoge la agencia de noticias rusa Interfax.
Esta gran empresa energética rusa, controlada por el Kremlin, demanda a Ucrania el pago de 1,951 millones de dólares (unos 1,440 millones de euros) antes del lunes a las 06:00 GMT.
Ucrania es una importante tierra de paso para el combustible suministrado a Europa occidental. Una suspensión del suministro podría afectar a varios países de la Unión Europea, ya que Ucrania se niega a separar el gas destinado al extranjero del que emplea para su suministro. Con todo, en los últimos tiempos ha ido dejando vencer los plazos impuestos a Ucrania.
El presidente ruso, Vladimir Putin, conversó hoy por teléfono con la canciller alemana, Angela Merkel, y con el presidente francés, François Hollande, sobre el conflicto del gas.
Putin subrayó que la situación es "difícil", según informó el Kremlin. Tanto Hollande como Merkel han expresado su confianza de que las negociaciones en Ucrania en lo referido al gas gas lleguen a buen puerto, según informó un portavoz del gobierno en Berlín.
El conflicto entre Kiev y Moscú no sólo se limita a los impagos, sino también al precio por el suministro. Rusia exige ahora 485.50 dólares por 1,000 metros cúbicos. En la negociaciones ofreció unos 385 dólares, pero Ucrania no quiere pagar más de 268 dólares. Tras el fracaso de las últimas rondas, ambas partes declararon que un nuevo encuentro probablemente sería infructuoso.