En un comunicado, la petrolera señaló que la producción del yacimiento comenzó el pasado sábado e indicó que subirá paulatinamente en potencia para alcanzar "próximamente" los 70,000 barriles equivalentes de petróleo, es decir, la mitad de su potencial.
Total espera que antes de 2015 el yacimiento produzca el mismo rendimiento que tenía antes del incidente que obligó a su cierre el 25 de marzo de 2012.
Según el grupo, ese incidente se debió a "una combinación de varios elementos sin precedente" en uno de los pozos y, más concretamente, a "un fenómeno de corrosión específica" en uno de ellos al nivel de un estrato arcilloso situado 1,000 metros por encima de la reserva.
"Las enseñanzas de esta investigación se han llevado a cabo para garantizar que nuestras operaciones actuales y futuras se realicen en condiciones de seguridad óptimas", señaló Total, que anunció el abandono de algunos de los pozos del yacimiento y el análisis de otros.
La petrolera se vio obligada a cerrar el pozo ante los riesgos de explosión derivados de la fuga, cuyo impacto ecológico Total ha considerado muy reducido.
El yacimiento de Elgin ha producido ya 700 millones de barriles equivalentes de petróleo y se calcula que todavía contiene otros 500 millones de barriles.