En un comunicado, el organismo indicó que las emisiones se ven fuertemente influenciadas por el año y tipo del vehículo, así como por el sistema de control de emisiones, por lo que, sin importar el tipo de combustible, entre mayor antigüedad tenga el automóvil más emisiones.
La CRE precisó que conforme a la Ley de Desarrollo Rural Sustentable, la producción de etanol en México se puede realizar mediante procesos biotecnológicos y enzimáticos del campo mexicano, además de actividades agropecuarias y forestales, sin poner en riesgo la seguridad y soberanía alimentaria del país.
“Aunque ya se cuenta con los resultados del estudio del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), el uso de gasolina E10 en la Zona Metropolitana del Valle de México requiere de modificaciones a la NOM-016. El procedimiento para llevarlas cabo lo establece la Ley Federal sobre Metrología y Normalización”, detalló.
De acuerdo con el organismo regulador, los resultados del IMP muestran que, en esta materia, ha tomado decisiones basadas en el análisis técnico y de mercado para cumplir con su misión de fomentar el desarrollo eficiente de la industria.
En junio de 2017, la CRE aprobó mejoras a la “Norma Oficial Mexicana NOM-016-CRE-2016, Especificaciones de calidad de los petrolíferos (NOM-016)”, para permitir la mezcla de 10 por ciento de etanol en gasolinas, excepto en las Zonas Metropolitanas del Valle de México, Guadalajara y Monterrey.
La restricción fue establecida por principio precautorio hasta tener evidencias técnicas de que el etanol en esta proporción no ocasiona daños al ambiente en las regiones referidas.
Con este objetivo, la CRE y la Secretaría de Energía (Sener) solicitaron al IMP la realización de dicho estudio, Instituto que implementó procedimientos estandarizados por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) a fin de determinar las emisiones generadas por la evaporación y combustión de la gasolina.
El Instituto aplicó dichos procedimientos en una flotilla de 12 vehículos de distintas marcas comerciales y modelos cuyos años oscilan entre 2005 y 2015. Esta muestra fue representativa de los automóviles que circulan en el Valle de México con los resultados antes descritos.