Una indagatoria conjunta –de la SFP a través de su Unidad de Responsabilidades en Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la propia empresa productiva del estado– arrojó que este grupo de servidores formaba parte de una red organizada, que operaba dispositivos tecnológicos para alterar los parámetros de medición en el llenado de autotanques de combustible.
La SFP comprobó que dichos servidores públicos omitieron acciones de seguridad operativa, durante el procedimiento de carga de hidrocarburo, lo que provocaba el sobre llenado en los autotanques a su cargo, poniendo en riesgo la integridad física del personal, de las instalaciones y del medio ambiente.
Además, la dependencia abrió procedimiento administrativo de responsabilidades a otros ocho servidores públicos de la TAD Chihuahua, de un total de 20 que podrían estar involucrados en estos hechos.
Con estas acciones, la SFP y Pemex reiteran su compromiso para seguir combatiendo toda conducta irregular o contraria a la ley.