El presidente de la filial en Nicaragua de la estadounidense AEI, César Zamora, declaró hoy a Efe que la venta "es un buen signo" con el argumento de que los nuevos propietarios "van a poder traer inversión" al sector energético.
Gas Natural Fenosa vendió sus participaciones en las compañías distribuidoras nicaragüenses Disnorte (83.69 por ciento) y Dissur (83.73 por ciento) a la sociedad nicaragüense TSK-Melfosur Internacional, conformada por las empresas españolas TSK y Melfosur, informó el martes la empresa en Barcelona (España).
Según explicó Zamora a Efe, el monto total de la inversión de TSK-Melfosur en Nicaragua podría llegar a 162.8 millones de dólares, ya que, aseguró, deberá desembolsar 85 millones de dólares en deudas de Gas Natural con las generadoras, y otros 20 millones de dólares por pérdidas por fuga de energía que "nadie pagaba".
"Para sacar esa rentabilidad, significa que la distribuidora es lucrativa", añadió el directivo de AEI Nicaragua.
Por su parte, José Adán Aguirre, presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada, valoró como positivo que la salida de Nicaragua de Gas Natural se haya dado de forma sigilosa, tras cinco años de controversias con el gobierno.
Asimismo, el presidente de Polares Energy, Mario Arana, dijo que espera una mayor estabilidad en el sector energético tras el cambio de dueños de las distribuidoras Disnorte y Dissur.
Gas Natural Fenosa mantenía diferencias con el gobierno de Nicaragua a causa de las pérdidas que tenía en la distribución y reclamaba una falta de apoyo para resolver el problema de las fugas y el robo energía.
Las autoridades nicaragüenses sostenían que la distribuidora incumplía su compromiso legal de invertir lo necesario para brindar un buen servicio.
TSK-Melfosur prometió informar de los detalles de la compra el jueves próximo.