Repsol vendió a la entidad financiera un 11.86 por ciento del capital social de YPF, algo más de 46.6 millones de acciones ordinarias, por 1,255 millones de dólares.
La operación generará a la española una plusvalía estimada en 622 millones de dólares antes de impuestos.
La participación que la petrolera mantiene en su antigua filial argentina queda reducida ahora a menos del 0.5 por ciento.
El gobierno argentino de Cristina Fernández de Kirchner expropió a Repsol -y nacionalizó- el 51 por ciento de YPF en abril de 2012.
En noviembre de 2013, tras duros enfrentamientos y acusaciones, las dos partes llegaron a un acuerdo de compensación que firmaron a finales de febrero de este año y que fija la indemnización en 5,000 millones de dólares pagaderos en bonos soberanos.