Martínez aseguró que "no tendría sentido vender parte de los activos antes de acudir a los mercados" y que utilizarán los ingresos de la ampliación para financiar las inversiones previstas en ese país tras los últimos hallazgos.
El directivo precisó que la salida a Bolsa no se producirá hasta que la petrolera estatal brasileña Petróleo Brasileiro concluya una ampliación de capital que podría alcanzar los 83,200 millones de dólares.
Por otra parte, Martínez explicó que la moratoria impuesta para la exploración del Golfo de México podría retrasar las perforaciones en uno de los yacimientos de la petrolera española en la zona, el denominado Buckskin, previstas para este año.
A pesar del retraso en la exploración, Repsol espera que Buckskin empiece a producir en 2016.
El gobierno de los Estados Unidos amplió en el mes de mayo una moratoria de seis meses en las aguas profundas del Golfo de México tras la catástrofe del vertido de BP.