"Al pasar de un esquema cerrado, donde el gobierno era el único proveedor que tenía el monopolio de la venta de gasolina, a uno abierto de competencia, es un proceso por el cual México tenía que haber pasado desde hace muchos años", consideró la vocera de esa fuerza política, Yulma Rocha.
En entrevista, refirió que por mucho tiempo se pidió que las autoridades hacendarias ya no determinaran los precios, lo cual ocurrirá; también se pidió que si disminuían los precios del petróleo bajaran los precios de la gasolina, lo cual también se concretará con este nuevo esquema, “nada más que ahora el oportunismo político de la oposición ya no ve esto que por muchos años pidieron.
"Los precios se van a determinar con las reglas del mercado y no por lo que imponga Hacienda, como muchos años se pidió; sino que el mercado debe de ser más competitivo", añadió.
En el modelo actual, detalló la también diputada federal, “pagamos menos por la gasolina que en otros países cuando los precios internacionales suben demasiado, pero también pagamos más cuando éstos disminuyen”.
De acuerdo con la legisladora, la liberación de las gasolinas permitirá que las variaciones en los precios internacionales también se vean reflejados en los precios de ese combustible.
Rocha Aguilar destacó los beneficios que trae la competencia, pues lo que ocurrirá a partir del año entrante en las gasolinas es similar a lo que ocurre con rubros como las telecomunicaciones, la telefonía celular y la televisión.
Pidió no dejar de lado los problemas que tiene Petróleos Mexicanos (Pemex) desde hace muchos años, como la falta de inversión, la infraestructura obsoleta, así como el robo de combustible.
Con el nuevo esquema en los precios de la gasolina, habrá inversiones de casi 100 millones de pesos en rubros como transporte y almacenamiento “y se esperan 12,000 millones de dólares al menos adicionales al expendio al público de combustibles, sumado a la inversión en la exploración de aguas profundas".
En cuanto al desabasto de gasolina, resaltó que Pemex ha dicho que tiene reservas, por lo que consideró que el organismo debe explicar oportunamente para brindar garantías y confianza a la población de que el abasto será suficiente.
Por separado, el Partido Acción Nacional (PAN) consideró que el gobierno federal debe encontrar alternativas que aligeren un posible impacto negativo para la economía familiar por el ajuste en el precio de los combustibles.
El coordinador de los diputados de esa fuerza política, Marko Cortés Mendoza, lamentó la escasez de gasolinas en algunos estados del país y llamó a las autoridades a que apliquen soluciones rápidas y efectivas al respecto.
Respecto al alza en el precio de los combustibles, se pronunció por que se tomen medidas para que el alza al precio internacional del barril de petróleo no afecte a los consumidores.
En tanto, el senador Mario Delgado Carrillo indicó que los incrementos al precio de las gasolinas y diesel pueden considerarse una estrategia para hacer atractivo el negocio de las gasolineras para los inversionistas extranjeros.
De su lado, la presidenta nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Alejandra Barrales, consideró que el aumento anunciado al precio de las gasolinas, impactará de manera directa en la gente más pobre del país.