"El petróleo se puede comprar en los mercados internacionales", afirmó Holzner en la rueda de prensa diaria de la CE al ser preguntada por las informaciones de cadenas de televisión iraníes acerca de que el régimen de Teherán había suspendido sus exportaciones a seis países de la UE.
Esa medida se habría tomado en respuesta a las últimas sanciones a los sectores de la energía y financiero de Irán impuestas por la Unión Europea.
Sin embargo, la televisión oficial en lengua persa, IRIB, señaló que las autoridades iraníes convocaron a los embajadores de varios países europeos, a los que se informó de que "Irán va a reconsiderar si sigue vendiéndoles petróleo", pero no afirma que se hayan suspendido las ventas.
El embajador de España en Irán, Pedro Villena, confirmó a Efe que fue convocado hoy al Ministerio de Exteriores en Teherán, pero negó que se le haya comunicado el corte de las exportaciones de crudo iraní a España.
La UE acordó el 23 de enero un embargo inmediato para los nuevos contratos petroleros con Irán, mientras que dio hasta el 1 de julio para poner fin a los ya existentes.
Holzner recordó que Arabia Saudita ya había señalado que iba a aumentar su producción petrolera, y que los países comunitarios habían indicado que acudirían a otros proveedores de crudo.
Otros países del Golfo Pérsico y Libia habían señalado a diplomáticos y responsables de la UE su disposición a incrementar sus ventas a Europa con la puesta en marcha del embargo a Irán.
Un problema aparte lo constituye Grecia, ya que la delicada situación económica que sufre le complica encontrar otros países de suministro.
Hasta ahora, Teherán permitía a Atenas retrasar los pagos por sus importaciones de crudo, lo que suponía un importante desahogo para el endeudado país.
El comisario europeo de Energía, Günther Oettinger, admitió ayer que no podía ofrecer "garantías" a Grecia de que tendrá el petróleo suficiente en caso de que Irán cortara las importaciones de crudo a la Unión Europea en los próximos días como represalia al embargo europeo.
Irán ha sido tradicionalmente uno de los principales proveedores de crudo de la UE -el quinto en 2010-, lo que afectará principalmente a Italia, España y Grecia, que tienen al país persa como un suministrador fundamental.
En el caso español, Irán fue en 2010 el principal vendedor de petróleo al país, con un 14.6 por ciento del total, aunque se prevé que España recurra al crudo de otros países del Golfo Pérsico o Nigeria para suplir este vacío.