Según un comunicado divulgado este martes, la compañía obtuvo un beneficio de 23,040 millones de dólares en los doce meses del año pasado frente a las pérdidas de 22,440 millones que registró en un 2020 marcado por las restricciones a la movilidad para frenar el coronavirus, que hizo desplomarse el precio del barril.
Exxon Mobil aumentó su facturación anual un 57 %, hasta 285,640 millones, con una producción de petróleo y gas solo un 2 % mayor a nivel interanual pero mayores márgenes en su negocio de refinería y una fuerte reducción en los costes, entre otras cosas, que le ha permitido aumentar su liquidez.
"Nuestra respuesta efectiva a la pandemia, inversiones focalizadas durante el ciclo bajista y ahorro en costes estructurales nos han posicionado para lograr los beneficios completos de la recuperación del mercado en 2021", dijo en la nota el consejero delegado, Darren Woods.
En el cuarto trimestre, el más seguido por los analistas de Wall Street, la empresa integrante del grupo de las "Big Oil" ganó 8,870 millones frente a los 20,070 millones perdidos en ese mismo tramo del año previo, mientras que sus ingresos se incrementaron un 82 %, hasta 84,965 millones.
En el desglose de datos, Exxon Mobil indicó que su negocio de exploración y producción ("upstream") produjo 3.8 millones de barriles diarios en el último trimestre del año y su facturación mejoró gracias al aumento de la demanda y los problemas en la cadena de suministro, que presionaron los precios.
La empresa se ha beneficiado de la recuperación de los precios del barril del petróleo de Texas, que alcanzó el pasado viernes un precio no visto en siete años, por encima de los 88 dólares, mientras que en las fechas de estos resultados se situaba ya por encima de los 60 dólares.
Por otra parte, la compañía se encuentra inmersa en una restructuración que distribuirá sus negocios en tres divisiones -"upstream", soluciones de producción y soluciones bajas en carbono- y trasladará su sede dentro del estado de Texas, de Irving a Houston.
Los resultados tuvieron una buena acogida en la Bolsa de Nueva York y las acciones de la petrolera subían un 1.86 % tras el inicio de las operaciones. En el último año, la empresa se ha revalorizado un 70 %.