Así lo afirma la petrolera BP en su 60 informe anual sobre la situación del mercado mundial del crudo, difundido hoy, en el que se destaca también que el volumen actual de consumo de combustibles fósiles sugiere que las emisiones a la atmósfera de dióxido de carbono (CO2) aumentan a un ritmo no visto desde 1969.
BP aclara que la causa de este incremento no es solo atribuible a China, ya que el incremento del consumo de energía tiene "una amplia base", con crecimientos por encima de la media tanto entre los países de la OCDE, como en los países no desarrollados.
"Entran en juego factores estructurales y cíclicos", manifestó Bob Dudley, consejero delegado de BP, en el prólogo del informe.
"El factor cíclico se refleja en el hecho de que la producción industrial ha rebotado con mucha fuerza a medida que el mundo se ha recuperado de la recesión global. Estructuralmente, el incremento refleja el rápido crecimiento económico en los países en vías de desarrollo", explicó el consejero delegado de la petrolera.
Dudley, cuya empresa tiene grandes intereses económicos en China, salió en defensa del país asiático asegurando que su gobierno se toma muy en serio los problemas medioambientales relacionados con su rápido crecimiento y su mayor necesidad de consumo de energía.
"El crecimiento no es de ninguna manera el único elemento que (los chinos) tienen en cuenta. Quieren mantener la cohesión social y quieren hacer que su crecimiento sea más sostenible. En resumen, están tan preocupados como nosotros por la seguridad energética y el cambio climático", dijo Dudley, que ha visitado China recientemente.
El máximo responsable de BP señaló que para hacer frente a estos problemas "podemos mirar a los mercados, a las herramientas políticas, a los avances tecnológicos y al aumento de las energías renovables", y subrayó que los mercados globales de la energía siguen mostrando gran fortaleza pese a las dificultades.
"Este año hemos visto que los mercados globales de la energía son resistentes. Pese a problemas significativos para el sistema mundial de la energía, como en los casos de Japón y Libia, la demanda sigue cubriéndose. Los mercados funcionan y los mercados funcionan mejor cuando son abiertos y transparentes", subrayó Dudley.