La segunda mayor petrolera de Estados Unidos, por detrás de Exxon Mobil, regresa así a los planes de recompra de acciones que interrumpió a principios de 2009, cuando el crudo de Texas se encontraba a un precio de 40 dólares el barril, alrededor de la mitad del que tiene ahora.
"Nuestra única intención es la creación de valor para los accionistas. La prioridad para nosotros es la preservación y el crecimiento del dividendo, el mantenimiento de unos resultados sólidos y la devolución de efectivo a nuestros accionistas a través de la recompra de títulos", explicó en un comunicado la directora financiera de Chevron, Pat Yarrington.
La directiva explicó que prevé que el ritmo de recompra de acciones se sitúe "entre los 500 y los 1,000 millones de dólares por trimestre" y aseguró que el presente proceso de recompra es "una muestra de la actual disciplina de capital y del sólido flujo de caja" de que disfruta la compañía.
El pasado julio Chevron, que asegura estar inmersa en nuevos proyectos petrolíferos y de gas, anunció que durante el primer semestre del año casi triplicó sus beneficios respecto al mismo periodo de 2009 al anotar en sus cuentas 9,961 millones de dólares en positivo, lo que tradujo en una ganancia neta por acción de 4.97 dólares.