"Nuestra intención no es un boicot", dijo hoy la jefa de Sauber, Monisha Kaltenborn, en Sao Paulo, donde este fin de semana se corre la penúltima carrera de la temporada.
Kaltenborn ve con buenos ojos la reunión que está programada para este fin de semana entre los equipos Lotus, Force India y Sauber con CVC, la empresa dueña de los derechos de comercialización de la competencia.
La jefa de Sauber, sin embargo, aseguró que no es sólo para intercambiar opiniones. "Tiene que pasar algo".
Las tres escuderías piden que haya un reparto más equitativo del dinero entre los equipos. Se estima que una escudería cuesta alrededor de 100 millones de euros (125 millones de dólares) al año.
La jurista aseguró que el modelo de la Fórmula 1 se sostiene en la variedad. Si sólo se limita a los grandes equipos -Ferrari, Mercedes, Red Bull o McLaren-, se asemejará más a una competencia nacional, criticó.
Los equipos Caterham y Marussia se perdieron el Gran Premio de Estados Unidos la semana pasada y tampoco competirán en Brasil tras entrar en suspensión de pagos.
En esa situación, se rumorea en el paddock sobre un posible boicot del resto de escuderías pequeñas en el Gran Premio de Abu Dabi, último de la temporada y que se disputará el 23 de noviembre.