En la segunda etapa acaba el nuevo proyecto del expiloto de MotoGP durante diez temporadas, quien dejó la categoría reina del motociclismo para enrolarse en un reto totalmente diferente, del asfalto a la arena, las dunas y las rocas, y que le rondaba en la cabeza desde hace tiempo.
Además de la dificultad de realizar un cambio así, los problemas le surgieron hasta el día antes de empezar el Dakar.
Primero, con una preparación corta de tres meses entre el final del Mundial y el inicio del Dakar, sufrió una lesión en el tobillo derecho que le lastró su puesta a punto.
Además, al llegar a Yeda dio positivo en coronavirus en el rutinario test PCR de la organización, pero finalmente, como le ocurrió a la también piloto de motos, la española Sara García, una segunda prueba dos días después resultó negativa y pudieron dar comienzo a la histórica carrera.
Petrucci estaba rindiendo a buen nivel como novato ya que ocupaba la 13ª posición en la clasificación general, a 34 minutos y 29 segundos del líder en motos, el austríaco Daniel Sanders (Gas Gas).