Hamilton lideraba la prueba, pero acabó perdiendo el Mundial en la última vuelta, después de un coche de seguridad que entró a falta de cinco vueltas y se retiró antes de la última, en la que Verstappen lo rebasó para hacerse con el título.
Mercedes alega que el procedimiento de arrancada tras el coche de seguridad no se ha ajustado al reglamento y piden que la clasificación sea la de la última vuelta, con Hamilton en primera posición.
La escudería de Brackley alega que se vulneró el artículo 48.12 del Reglamente Deportivo de la F1.