Tras convertirse en el segundo piloto que da un podio a la filial de Red Bull -el alemán Sebastian Vettel fue campeón en Monza en 2008-, Daniil Kvyat valoró su tercer puesto como "increíble".
"Brindarle un podio a Toro Rosso es increíble. Ha sido una carrera loca y a mí me ha salido bien para ser tercero", sostuvo.
Para Kvyat, este Gran Premio "ha sido como una película de terror o una comedia negra". "Ha sido una montaña rusa", dijo por las condiciones cambiantes del trazado, por la lluvia.