Kolles, no obstante, espera "acabar la prueba con los dos coches y conseguir un buen resultado antes de las vacaciones de verano".
El técnico alemán de origen rumano ha destacado "las altas temperaturas y el tramo estrecho del circuito, que hacen que los pilotos y los controladores vayan al límite", y ha dicho que como adelantar es "casi imposible, el rendimiento con un bajo nivel de combustible en la calificación es muy importante".
En declaraciones recogidas por la página web de la escudería con sede en la región de Murcia, Kolles ha señalado que en Hungría "se necesita un coche con buen agarre mecánico y un motor progresivo", y ha agregado que los conductores "tienen que sostener las exigencias físicas".
La carrera de Hungaroring, circuito construido a mediados de los años 80 y que se localiza a 19 kilómetros del centro de Budapest, "va a ser una de las carreras más duras de la temporada, pero esperamos terminarla de nuevo con los dos coches y obtener un buen resultado antes de las vacaciones de verano", ha deseado Kolles.