Extraordinario sabor de boca dejó la visita al Autódromo Hermanos Rodríguez para correr el Gran Premio de México, donde Esteban Gutiérrez hizo un gran esfuerzo ante más de 100 mil fans que le inyectaron gran energía para la parte final de la temporada.
A bordo del auto Claro-Telcel del Haas F1 Team, Gutiérrez afrontó una competencia muy complicada en el Hermanos Rodríguez, sin embargo el empuje de la gente le permiten afrontar con buena cara y lleno de energía la visita al circuito paulista de 4.309 kilómetros.
El equipo estadounidense se dispone a cerrar su primera temporada de existencia en la máxima categoría, la cual ha sido de altibajos, de mucho aprendizaje y con el firme objetivo de incrementar la cosecha de 29 puntos, que lo tienen ubicado en el octavo puesto del Campeonato de Constructores.
Este viernes se disputará una doble tanda de prácticas, el sábado habrá una tercera sesión de entrenamientos., seguida por la calificación, y el domingo el Gran Premio de Brasil arrancará a las 10:00 horas (tiempo del centro de México), a 71 vueltas.
Esteban Gutiérrez comentó: "Es genial que vivimos dos eventos que estaban llenos de un gran ambiente. Creo que todo el mundo se divirtió y disfrutó la carrera. Desafortunadamente para nosotros, no fue genial en términos de resultados. A pesar de que los resultados no fueron lo que queríamos, los dos eventos fueron muy positivos porque fue muy significativo para nosotros ir a Austin como equipo estadounidense, y luego a México y ser mexicano. Fue una experiencia increíble".
Romain Grosjean dijo: "Fue muy bueno correr en los Estados Unidos. Fue la primera carrera en casa para el equipo y fue especial. Nos las arreglamos para anotar un punto, que fue bastante impresionante. Hay mucho amor por la Fórmula Uno en América y también en México. Los aficionados mexicanos son de los mejores del mundo. Creo que el mercado estadounidense está creciendo y creciendo. Si seguimos teniendo buenos resultados, y si conseguimos más carreras ahí, debemos tener una base muy fuerte de fans".