'Checo', nacido hace 31 años en Guadalajara (Jalisco), debutó en F1, con Sauber, en 2011, una temporada en la que no subió al podio, ya que su mejor posición fue un séptimo en Silverstone (Inglaterra). Sin embargo sólo tardó dos carreras en su segundo año en la categoría reina, de nuevo con Sauber, para acabar segundo en Malasia, un día en el que el doble campeón del mundo español Fernando Alonso -ahora en Alpine- ganó en la lluviosa Sepang. Y ese año festejaría otros dos podios, al acabar tercero en Montreal (Canadá) y segundo en Monza (Italia).
Tras un año en McLaren, 2013, en el que no hubo podios y en el que su mejor clasificación fue un quinto puesto en el Gran Premio de India, 'Checo' fichó por Force India, con la que festejó su primer podio en su tercera carrera: el Gran Premio de Baréin, que concluyó tercero.
El quinto podio del bravo piloto tapatío llegaría una temporada más tarde, en Sochi (Rusia), donde fue tercero. Un puesto en el que acabó de nuevo dos veces en 2016: en las calles de Mónaco y en el estreno de Baku, que se presentó en sociedad albergando el Gran Premio de Europa de ese año.
En 2017 su mejor puesto fue un cuarto en el Gran Premio de España, en Montmeló (Barcelona) y un año después 'Checo' volvió a ser tercero en Azerbaiyán, en una carrera que ya se denominaba en el nombre del país y en la que el pasado 6 de mayo festejó la segunda de sus dos victorias en la división de honor del automovilismo.
2019 fue un año sin puestos de honor para el mexicano, pero la temporada pasada, la última de las siete que pasó en la escudería que, tras entrar en concurso de acreedores, pasó a denominarse Racing Point y que ahora es Aston Martin, Sergio firmó un sensacional fin de temporada. Fue segundo en la pista de patinaje en la que se convirtió el Istanbul Park -donde este domingo fue tercero- el día que el inglés Lewis Hamilton certificó de forma matemática su séptimo título, que igualaba los siete del alemán Michael Schumacher. Y le puso la guinda tres semanas más tarde al lograr su primera victoria, en el Gran Premio de Sakhir, nombre con el que se bautizó la segunda de las dos carreras disputadas en Barein para engrosar el calendario del Mundial del covid-19.
El pasado 6 de junio, el campeón de Jalisco emuló, al lograr en Azerbaiyán su segunda victoria, al inolvidable Pedro Rodríguez, el mayor de los hermanos que dan nombre al Autódromo de Ciudad de México (donde se correrá el próximo 7 de noviembre) ; que, antes de fallecer accidentado, el 11 de julio de 1971, en las 200 millas de Norisring, en Nüremberg (Alemania), había ganado los Grandes Premios de Suráfrica, en 1967; y de Bélgica, tres años después. Y dos semanas después logró, al acabar tercero en Paul Ricard, el que hasta este domingo era su último podio. En el Gran Premio de Francia.
Tras completar una sensacional actuación, asimismo en beneficio de su compañero neerlandés Max Verstappen, que, gracias a la maestría con la que el tapatío contuvo a Hamilton, recuperó el liderato del Mundial, Sergio volvió al podio este domingo. A orillas del estrecho del Bósforo, donde se retrató junto al finlandés Valtteri Bottas (Mercedes), ganador de la carrera; y a 'Mad Max', que acabó segundo.
Desde ahí, 'Checo' fue feliz viendo ondear un buen puñado de banderas mexicanas en las gradas del Istanbul Park. Donde brilló de nuevo, al firmar su decimotercer podio: el tercero con Red Bull y el segundo seguido en Turquía.