Ahí se decidirá, entre Max Verstappen (Red Bull) y Lewis Hamilton (Mercedes), el Mundial de Fórmula Uno, que se cerrará el próximo 12 de diciembre en Abu Dabi: una semana después de otro estreno, el de Arabia Saudí.
Catar, cuya presencia en el calendario se anunció a finales de septiembre, cerrará el 'programa triple' que arrancó hace dos fines de semana en Ciudad de México, donde ganó Verstappen -y su compañero mexicano Sergio Pérez subió al podio-; y se prolongó el pasado domingo en Sao Paulo (Brasil), con exhibición de Hamilton. El emirato del Golfo Pérsico abre a su vez el periplo de Oriente Medio, que se reanudará dos fines de semana después con el debut del circuito urbano de Yeda, sede de la penúltima de las 22 carreras del certamen: siete días antes de la clausura de Yas Marina, en Abu Dabi, la capital de los Emiratos Árabes Unidos.
Hamilton reavivó el mundial en Brasil
Después del poderío mostrado por Red Bull en Autódromo Hermanos no pocos pensaron que las horas para el final del dominio de Hamilton y de Mercedes -ganadora de los últimos siete Mundiales de constructores- estaban contadas. Más aún, cuando, tras recibir una sanción de cinco puestos en parrilla, por cambiar la cámara de combustión de su Mercedes; y ser descalificado, después, de la cronometrada del viernes, por irregularidades en el DRS, 'Sir' Lewis afrontó desde el último puesto de la parrilla la calificación sprint.
Pero lejos de permitir que 'Mad Max' le dejase herido de muerte en Sao Paulo, el astro inglés, de 36 años, completó un actuación sensacional, remontando hasta la quinta plaza en la prueba sprint del sábado. El domingo arrancó décimo y culminó, con otra remontada grandiosa, uno de los fines de semana más brillantes de su sobresaliente carrera. Amplió a 101 su propio récord histórico de victorias en la F1 y recortó a 14 puntos la ventaja que le saca la estrella neerlandesa, doce años más joven que él.
Si Verstappen confirmó que ya está preparado para reinar, Hamilton advirtió de que no tiene intención de ceder el trono. Y que no dejará escapar con facilidad la oportunidad de anotarse un inédito octavo título, que rompería a su favor el empate que le une al alemán Michael Schumacher. El 'Kaiser'. Convaleciente aún del grave accidente de esquí que sufrió a finales de 2013 en Meribel (Alpes franceses).
Losail (Catar)
De tal manera, la Península Arábiga será escenario de la resolución del Mundial más apasionante de los últimos años. Emoción que crece si se tiene en cuenta que dos de las tres últimas carreras se disputarán en escenarios inéditos.
El primero de ellos, este fin de semana, en Losail. Un circuito de 5.380 metros, con 16 curvas (seis a la izquierda) situado a unos 20 kilómetros al norte de Doha, la capital catarí; inaugurado en 2004 para el Mundial de motociclismo; sede fija de ese campeonato desde entonces y en el que este año se impusieron los españoles Maverick Viñales (en MotoGP) y Jaume Masiá (en Moto3).
La primera carrera de la historia de la F1 que se disputará en Losail está prevista a 57 vueltas para completar un recorrido de 306,6 kilómetros.
Yeda (Arabia Saudi)
Dos semanas después. de las orillas del Golfo Pérsico se pasará a las del Mar Rojo, donde Yeda albergará el primer Gran Premio de Arabia Saudí de la historia. Una prueba anunciada a finales del año pasado y que se disputará en la segunda pista más larga del campeonato, después de la de Spa-Francorchamps, sede del Gran Premio de Bélgica (7,004 metros).
La de Arabia mide 6,175 metros, tiene 27 curvas y está llamada a convertirse en el circuito callejero más rápido del mundo.
Yas Marina (Abu Dabi)
Si el certamen no se decidiese en alguna de las dos debutantes, el campeón se certificará en los Emiratos Árabes Unidos.
Yas Marina, presente en el Mundial desde 2009, albergará la decimotercera edición del Gran Premio de Abu Dabi. Una pista de 5,281 metros y 21 curvas a la que el 12 de diciembre está previsto que se den 58 vueltas, para un total de 306.1 kilómetros. En la que Verstappen ganó el año pasado; pero en la que nadie iguala los cinco triunfos de Hamilton.