Luego de un intenso año para el piloto ARRIS-Telcel, en el que participó en dos seriales, este 21 y 22 de noviembre enfrentará la última fecha de la NASCAR México Series en el Súper Óvalo Chiapas, con su auto #2.
Tanto el regiomontano como el equipo están listos para enfrentarse por segunda ocasión en el año al óvalo de mil 200 metros, en abril consiguieron un top-10, y en esta ocasión no cesarán en su intento de obtener la tan afamada victoria.
“El objetivo por ser la última carrera en NASCAR en el año es cerrar fuerte. Ya no podemos pelear el campeonato y entonces nos gustaría irnos con un buen sabor de boca. No fue la temporada que esperabamos y tenemos una última oportunidad de enderezar los resultados y ganar sería lo único que nos dejaría un poco tranquilos. El equipo se merece el triunfo por el esfuerzo y el trabajo realizado a lo largo del año”, puntualizó Abraham.
Las actividades comenzarán el sábado como ya es costumbre con la doble sesión de prácticas, el domingo a temprana hora se realizará la calificación y poco después del mediodía se llevará a cabo la gran final de NASCAR México Series, pactada a 200 giros.