Se trata del cuarto mes consecutivo de caída del principal mercado automovilístico español y este registro de octubre es el más alto en porcentaje desde que el gobierno decidió no prorrogar las ayudas a la compra del Plan 2000E.
Como consecuencia de estas ayudas, las ventas de automóviles crecieron significativamente en la primera mitad del año, por lo que todavía, en términos de acumulado anual y pese a los retrocesos de los últimos meses, arrojan una evolución positiva del 9.4 por ciento entre enero y octubre, con 848,555 unidades, por las 755,580 de los mismos diez meses de hace un año
La situación del mercado es motivo de preocupación para los fabricantes, que consideran en un comunicado que si no se recupera el mercado, "España perderá atractivo para mantener los niveles de producción actuales".
Un mercado fuerte es un factor de localización para las factorías instaladas en España, asegura Anfac, que recuerda que las marcas con plantas de fabricación en España han dejado de vender en los últimos tres años 1.3 millones de unidades.
Las consecuencias de un mercado estancado en unos niveles bajos son muy negativas tanto para el empleo de las redes comerciales como de las propias fábricas.
Hoy, las inversiones siguen al crecimiento de los mercados en las distintas regiones y las multinacionales pierden interés en invertir en un país con un mercado pequeño, argumenta Anfac.
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Los crecimientos de la economía española se prevén muy limitados en los próximos años y ello coincidirá con posibles adjudicaciones de nuevos modelos a fábricas españolas, que no se verán favorecidas por un entorno tan desfavorable.
Por ello, Anfac considera que es imprescindible mejorar la situación de mercado y conseguir recuperar niveles de matriculación más aceptables.
Anfac, que recuerda que a final de año el mercado español se situará por tercer año consecutivo en niveles de principios de los años 90, realiza una previsión para el año 2011 que está por debajo de las 900,000 unidades vendidas.
El volumen de ventas logrado el pasado mes de octubre lleva el desplome del mercado de turismos y vehículos todoterreno a niveles de hace 15 años.
Las cifras acumuladas, aún con el crecimiento del 9.4 por ciento que se va reduciendo mes a mes, es consecuencia de los efectos positivos que ha tenido sobre la demanda el Plan 2000E en la primera mitad del año, recuerda Anfac.
Los fabricantes, que añaden que hay que tener en cuenta que el año anterior ya registró unas matriculaciones muy bajas, destaca del mercado de octubre un nuevo desplome de la demanda de los clientes particulares, que se sitúa por el 50 por ciento.
Luis Valero, director general de Anfac, explicó a Efe que los dos próximo meses esta es la tendencia, alimentada por la desconfianza de los compradores por la situación de la economía, el desempleo y las dificultades del financiamiento al consumo.
La recuperación de la economía será la que produzca la recuperación de la demanda de automóviles, porque las ayudas a la compra han sido un paliativo "para aguantar el tirón", concluyó.
En octubre, la marca que ha logrado el liderazgo del mercado ha sido Volkswagen, con 5,275 unidades vendidas, seguida por Renault y Peugeot (5,251 y 5,038, respectivamente), aunque Seat lidera el mercado acumulado de enero a octubre con 78,262 unidades, frente a las 75,129 de Volkswagen, su marca perseguidora.
El modelo con mayor número de matriculaciones ha sido el Renault Megane, con 2,998 unidades, seguido por el Citroen C4 y el Seat Ibiza, con 2,099 y 2,082 unidades, respectivamente. El Megane lidera el mercado acumulado con 39,832 unidades, seguido por el Seat Ibiza, con 35,205.