Para Kia México, los animales domésticos, son un ejemplo de la evolución. Se han vuelto capaces de entender nuestra forma de comunicarnos y de leer nuestras emociones, lo que nos ha permitido crear con ellos, vínculos similares a los que construimos con las personas que más queremos, además, nos brindan su amor de forma incondicional por lo que, para muchos, terminan convirtiéndose en un integrante más de la familia.
Quienes han experimentado la partida de su compañero peludo conocen el dolor que trae consigo esta situación. Ya sea por vejez que nuestra mascota se ha ido, por un accidente o porque nos vemos obligados a tomar la decisión de brindarle una muerte digna, esto, no deja de ser un golpe emocional muy fuerte.
Es por ello que Kia Pet en alianza con Proyecto Nenuki, (organización dedicada a la adopción responsable), comparten algunos consejos para ayudarnos a comprender el duelo y hacer más llevadero este proceso:
Aceptar el dolor y ser honestos con nosotros mismos. Cuando aceptemos que estamos tristes y debemos superar el duelo, todo será más fácil.
Es de gran apoyo desahogarnos con alguien de confianza. Si sentimos la necesidad de llorar, hagámoslo, es parte del proceso y ayudará a superar la pérdida.
Expresar nuestros pensamientos con palabras. Esto ayudará a reorganizar nuestros sentimientos e ideas.
Si se ha tomado la decisión con el veterinario de darle una muerte digna, hay que valorar si estamos preparados para estar presentes, ya que podría ser un momento muy duro, incluso traumático. En caso de que decidamos acompañarlo, llamemos a alguien de confianza para que sea nuestra red de apoyo.
Es importante decidir dónde deseamos depositar los restos de nuestra mascota. Algunas personas optan por enterrarla en el jardín, otros plantan un árbol con sus cenizas y otros resguardan sus restos en la cripta familiar.
Despedirnos de nuestra mascota si es necesario para nosotros. Podemos dedicar o escribir algunas palabras o hacerle un homenaje con sus fotos o videos.
Donar sus objetos preferidos y medicamentos a algún centro de adopción o refugio para que su recuerdo sirva a otros animales menos favorecidos.
Agradecer su presencia en nuestra vida y aceptar su partida recordando los momentos felices que nos dieron, este es el mejor tributo que podemos brindarle.
Cada mascota es única e irrepetible y no debemos tratar de sustituirla por otra desesperadamente. No es recomendable intentar llenar el vacío de su ausencia teniendo a otra de forma inmediata. Cuando hayamos pasado por una gran parte del duelo y estemos listos, podremos brindar amor y cuidado a otro peludito que busque un hogar.
Fuente: Proyecto Nenuki
Para mayor información visita: kia-pet.mx