Si bien el comprador percibe esta medida como un beneficio, este tipo de apoyos, al favorecer en primera instancia a la industria, se deben otorgar a cambio de un compromiso por parte de los fabricantes de vehículos para que produzcan autos más eficientes. Esa es la manera en que realmente el comprador y la sociedad saldrán beneficiados.
La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) estima que la eliminación de la tenencia podría incrementar la venta de autos en más de 100 mil unidades en lo que resta del año, para cerrar el 2010 con cerca de 900 mil autos vendidos y mantener este crecimiento para superar nuevamente en 2011 las ventas por un millón de vehículos, como ocurrió entre 2004 y 2008.
Sin embargo, dijo Moncada, si se cumplen estos pronósticos con automóviles no eficientes habrá graves problemas ambientales en todo el país, lo que será altamente contradictorio con las políticas contra el calentamiento global que impulsa el gobierno mexicano. Por eso –afirmó- es indispensable condicionar la eliminación de la tenencia a la mejora en la eficiencia vehicular, lo cual beneficiará a quienes adquieran autos "limpios" y a la sociedad en su conjunto.
En ese sentido, explicó que la eliminación de la tenencia debe enfocarse a vehículos eficientes, es decir, automóviles que rindan al menos un promedio de 12 kilómetros por litro de gasolina en ciudad (más de 14 km/l si se combina el rendimiento en ciudad-carretera),y cuyas emisiones por kilómetro recorrido estén por debajo de los 150 gramos de dióxido de carbono (CO2), el más abundante gas de efecto invernadero, causante del cambio climático.
El sector automotriz ocupa un sitio clave en la economía mexicana, sin embargo el paquete de apoyo fiscal y financiero que les otorga el Gobierno Federal tiene que llevar un compromiso por parte de esta industria para apostar por la eficiencia energética y colaborar en la creación de una norma que promueva vehículos con mayor rendimiento cada año, dijo Moncada.
Estas disposiciones deberían acompañar la publicación de la Norma de Eficiencia Vehicular -un compromiso incumplido del gobierno federal-, para que así tanto la eliminación de la tenencia como los apoyos crediticios sólo se otorguen a quienes adquieran autos eficientes.
"Esta medida no afectaría a ninguna marca en particular, ya que todas tienen modelos eficientes. Sabemos que es importante mantener empleos y cadenas productivas, pero los recursos del erario público no deben ser entregados de manera incondicional. Esta debería ser una oportunidad para impulsar la mejoría ambiental en el mercado automotriz e iría en el sentido de los compromisos que está tomando el gobierno mexicano en materia de cambio climático", destacó Gerardo Moncada.
De otra forma, comentó, no se entiende que México sea el país sede de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP16) y por otra parte apoye el crecimiento del parque vehicular no eficiente.