El grupo obtuvo una facturación de 4,800 millones de euros, lo que supone un crecimiento interanual del 9 por ciento, y que el 40 por ciento del total de estos ingresos procediesen de mercados fuera de Europa.
En el último ejercicio fiscal, la compañía dedicó a inversiones en I+D+i un total de 428 millones de euros.
El crecimiento de estas magnitudes, según la empresa, obedece al impulso de la demanda de vehículos de gama alta en mercados emergentes y a los últimos desarrollos de la compañía en materia de eficiencia energética, seguridad o tecnología LED, así como a los resultados registrados en el sector automotriz en equipo original y posventa.
En la rama del automóvil, Hella aumentó sus ventas en un 9.4 por ciento, hasta los 3,500 millones de euros, mientras que en el área posventa, la facturación fue de 1,000 millones, gracias al impulso de los mercados de Europa del Este, Asia y América del Norte.