TRW informó que la planta, de unos 14,000 metros cuadrados de extensión, fabricará las unidades de control hidráulicas para una variedad de sistemas de control electrónicos, que forman parte de los sistemas de freno regenerativo en vehículos híbridos y eléctricos.
"La nueva planta de frenos complementará nuestra instalación existente en Queretaro y representa una inversión significativa en tecnologías y procesos de fabricación de frenado avanzados. La planta será adaptada para el trabajo y montaje del sitio limpio para cumplir los requisitos rigurosos de la limpieza del montaje", dijo Doug DelGrosso, vicepresidente global de operaciones de Frenos de TRW.
La multinacional tiene previsto iniciar la actividad productiva en la nueva planta en el primer trimestre de 2012 y su estimación es que la planta cuente con una plantilla de 450 personas cuando funcione a pleno rendimiento.