"Tenía muchas ganas de correr en casa y aunque sabía que sería una carrera dura, todo ha terminado demasiado pronto para mí", comentó Liuzzi.
"Tuve una buena salida y adelanté a los Virgin, a los Lotus y a Daniel (Ricciardo, su compañero australiano), pero luego intenté realizar otro adelantamiento y me cerraron el paso. Esto provocó que me fuera a la hierba. Al intentar frenar, perdí el control del coche y choqué contra (el ruso Vitaly) Petrov (Renault), que no tenía nada que ver con el incidente", explicó el italiano.
"Así que me gustaría pedirle perdón a él, a (Nico) Rosberg (alemán, de Mercedes) y los otros pilotos que se han visto obligados a retirarse por esto", indicó.
"Ya ha terminado, pero somos luchadores y tenemos ya la mirada puesta en el próximo Gran Premio", manifestó Liuzzi tras la carrera de Monza.