El mandatario promulgó la norma en Cochabamba, en coincidencia con la visita a La Paz del brasileño Marco Aurelio García, asesor de Asuntos Internacionales de Lula da Silva, que se reunió con autoridades bolivianas para discutir temas energéticos, comerciales, sociales, de minería y de seguridad.
Morales deploró hoy que la aprobación de la norma se haya demorado en la anterior Cámara de Senadores, dominada por la oposición.
"Tuvo que haber otro Congreso Nacional para que se pueda aprobar este contrato y garantizar los 322 millones de dólares", dijo el mandatario y felicitó a los actuales parlamentarios por su rapidez para aprobar la norma.
Agradeció a quienes lo apoyaron en las elecciones generales de diciembre pasado, en las cuales no sólo fue reelegido con el 64.2 por ciento de la votación, sino que, además, su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS), obtuvo la mayoría cualificada de dos tercios en ambas cámaras de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
El convenio entre Bolivia y Brasil fue firmado en agosto de 2009, durante una visita de Lula da Silva a la localidad de Villa Tunari, en el trópico de Cochabamba.
Precisamente, el proyecto vial que financiará Brasil comprende la construcción de una carretera que conectará a esa población con la localidad de San Ignacio de Moxos, en Beni.
Esta infraestructura formará parte en un futuro del conocido como "corredor bioceánico" pensado para conectar el puerto atlántico de Santos (Brasil) con el de Iquique (Chile) en el Pacífico.
La construcción de la carretera está a cargo de la brasileña OAS Ltda., que tendrá tres años y medio para concluir el proyecto.