El presunto contrabando fue descubierto el sábado tras una operación encubierta después de que las autoridades hondureñas habrían sido alertadas, indicó a periodistas un portavoz del Ministerio Público.
Agregó que los 150,000 galones de diesel venían en una embarcación de Venezuela, con bandera de Panamá, y que en la operación fueron detenidos ocho hombres, entre ellos dos capitanes del buque identificados como Jorge Alberto Mejía y Allan Antonio Girón, de quienes no se informó su nacionalidad.
La embarcación habría zarpado desde Maracaibo, Venezuela, según la información de las autoridades hondureñas, que el pasado 12 de septiembre indicaron que en las Islas de Bahía, donde se localiza Roatán se estaban vendiendo combustibles de contrabando, procedentes de América del Sur y México.