Este estudio revela que a partir del sexto año, que es cuando el vehículo comienza a necesitar revisiones más periódicas y sustitución de piezas por desgaste, los mantenimientos preventivos y correctivos de un híbrido suponen unos 3,200 euros anuales, frente a los 1,156 euros del eléctrico, lo que hace más rentable su paso por el taller.
De hecho, si se compara con los motores tradicionales, el mantenimiento de un eléctrico es un 56 por ciento más económico que uno de gasolina y hasta un 54 por ciento más barato que un diesel debido, en parte, a que su menor componente mecánico no requiere operaciones rutinarias como la sustitución del aceite, filtro de aire o combustible, correa de distribución, etc.
Concretamente, el eléctrico sólo necesita una pequeña revisión cada 5,000 horas, un periodo de tiempo en el que un vehículo de combustión convencional ha recorrido una media de 50,000 kilómetros, habiendo necesitado al menos cinco cambios del filtro de aceite, con el costo que eso supone.
José Luis Gata, responsable de Ventas, Fabricantes y Asociaciones de Audatex, considera que, a pesar de las barreras de autonomía, recarga de batería y alto precio que presenta todavía el vehículo eléctrico, lo cierto es que el costo por kilómetro es muy bajo y su tecnología hace que apenas requiera mantenimiento mecánico.
Es por ello, añade, que sus ventajas de ahorro hay que verlas claramente en términos de consumo y posventa.
El análisis de Audatex refleja, por otra parte, notables diferencias en cuanto al precio de los neumáticos según tipo de vehículo y kilometraje recorrido.
En el caso de los coches eficientes, mientras el eléctrico vuelve a ser el más económico, con unos 600 euros de media en gasto de neumáticos, el coste en ruedas para un híbrido cada 120,000 kilómetros es de casi el doble, unos 1,124 euros.
Asimismo, si se comparamos con el resto de motorizaciones, los vehículos eléctricos son un 69 por ciento más rentables que los gasolina (869 euros) y un 64 por ciento en el caso de los modelos diesel, cuyos conductores gastan 300 euros más en la reposición de sus neumáticos.