Según informó hoy la institución, un grupo selecto de esos agentes, miembros de la unidad de Protección de Personas Importantes (PPI), tendrá a cargo el cuidado directo de los jefes de estado y de gobierno que visitarán Chile.
Los carabineros contarán con el apoyo de camiones "satelitales", desde los que se supervisarán en directo todas las cámaras de seguridad de la capital chilena, de 6,2 millones de habitantes.
Además, habrá francotiradores del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) apostados en puntos estratégicos, y helicópteros que vigilarán el traslado de presidentes y ministros de relaciones exteriores.
También se utilizarán máquinas detectoras de metales a distancia para interceptar armas.
La policía controlará el acceso a todos los lugares donde se celebren actividades oficiales, en especial en el Espacio Riesco, el centro de convenciones donde se celebrará la cumbre, situado en la zona norte de Santiago.
Además, la policía implementó un plan de vigilancia especial en los trece hoteles donde se alojarán los mandatarios.
Varios de ellos coincidirán en los mismos hospedajes, como es el caso del presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, y la canciller alemana, Angela Merkel.
Entre los asistentes estarán también el presidente cubano, Raúl Castro; el vicepresidente venezolano, Nicolás Maduro, y los mandatarios de Perú, Ollanta Humala; Bolivia, Evo Morales; Brasil, Dilma Rousseff; Colombia, Juan Manuel Santos, y Argentina, Cristina Fernández.
La Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la UE se celebrará los días 26 y 27 por la mañana, mientras que el 27 por la tarde y el día 28 se desarrollará otra cumbre que reunirá solo a los 33 países de la Celac.