Leclerc marcó la vuelta rápida de la jornada en el segundo entrenamiento, al cubrir los 4.318 metros de la pista húngara en un minuto, 18 segundos y 445 milésimas, 217 menos que el inglés Lando Norris (McLaren) y con 231 de ventaja sobre su compañero madrileño; que se inscribió tercero en la tabla de tiempos y, al igual que los anteriores, dio su mejor giro con el compuesto blando; antes de que todos practicasen la simulación de carrera en el tramo final del ensayo con gomas más duras.
El neerlandés Max Verstappen (Red Bull), que lidera el Mundial con 63 puntos de ventaja sobre el monegasco, marcó el cuarto crono del día; y su compañero, el mexicano Sergio Pérez -tercero en el certamen, a 70 unidades-, el noveno.
Verstappen, de 24 años, que el pasado domingo asestó casi sin quererlo un importante golpe al Mundial al firmar su séptima victoria de la temporada en Francia -igualando los 27 triunfos del triple campeón del mundo escocés Jackie Stewart (1969, 71 y 73)-, donde perdió una ocasión de oro Leclerc. Retirado, tras accidentarse en error propio, cuando había tomado la salida desde la 'pole'.
Leclerc abandonó por tercera vez en lo que va de año una carrera en la que había salido primero. En el Paul Ricard, donde Sainz brilló en un fin de semana que hubiese sido de matrícula de honor sin la penalización, por cambiar motor, que lo envió al fondo de la parrilla; y si su equipo no hubiera fallado en un 'pit stop' en el que, además, fue sancionado con cinco segundos por un 'unsafe release' (liberación peligrosa); antes de remontar catorce puestos para acabar quinto una carrera que pudo haber concluido en el podio.
El caso es que, pase lo que pase en Hungría, Verstappen regresará de las vacaciones como líder del Mundial. Motivo más que suficiente para que Ferrari, sí o sí, deba minimizar daños antes del parón. Si no desea pasar con más preocupaciones de las debidas las tres semanas y media de asueto que se tomará la categoría reina.
Sainz había sido el más rápido por la mañana en el primer entrenamiento, en el que aventajó en 130 milésimas a 'Mad Max' y en 289 milésimas a su compañero del principado de la Costa Azul.
El doble campeón mundial asturiano, en excelente forma a pesar de ser el más veterano de la parrilla, que celebró -junto a sus padres, Ana y José Luis, principal responsable del Circuito y Museo Fernando Alonso, en las afueras de Oviedo; su hermana, Lorena; y sus sobrinas, María y Bianca- su 41 cumpleaños en el circuito en el que en 2003 festejó la primera de sus 32 victorias en la F1, había sido décimo en el ensayo matinal, a un segundo y seis décimas de su compatriota.
A algo más de ocho décimas y media de Sainz, con el sexto crono, se había quedado 'Checo', al que el inglés George Russell (Mercedes) le 'birló' el podio en Francia; al relanzarse la prueba, de forma no del todo clara, tras un coche de seguridad virtual. Una carrera en la que Mercedes vislumbró la luz al final del túnel, al firmar asimismo el segundo puesto del siete veces campeón mundial Lewis Hamilton, que, lejos del estado de los pasados ocho años, encadenó, al menos, su cuarto 'cajón'.
En el primer libre, sin mayores incidencias, participó el polaco Robert Kubica, que se subió al Alfa Romeo del finlandés Valtteri Bottas y marcó el decimonoveno crono.
En el segundo, asimismo caluroso, después de que Alpine homenajease en su 'motorhome' al genial piloto asturiano, Leclerc se puso las pilas y marcó el mejor tiempo. En una sesión en la que trompeó el tailandés Alex Albon, de Williams; y en la que tanto el monegasco, como 'Sir' Lewis perdieron ligeramente el control de sus monoplazas entre la cuarta y la quinta de las 14 curvas de una pista en la que la gestión de la degradación de los neumáticos será muy importante y en la que es muy complicado adelantar.
Motivo por el que será de vital importancia la calificación de este sábado; que, para más inri, si se cumplen las previsiones más radicales, podría disputarse bajo lluvia intensa.
Los mejores tiempos del día se marcaron en la sesión vespertina y con el neumático blando; antes de que todos practicasen la simulación de carrera en el tramo final del ensayo, con gomas más duras.
Leclerc mejoró en dos décimas a Norris y en 231 a Sainz, que está que se sale; listo para aprovechar su oportunidad si el monegasco vuelve a fallar.
El otro McLaren, el del australiano Daniel Ricciardo, se inscribió quinto en la tabla de tiempos, a cuatro décimas de Leclerc. Entre Verstappen y Alonso, que acabó sexto, a seis décimas de Charles. Y que, con agua, sacará la caña este sábado. Para intentar pescar, una vez más, en río revuelto.
Hamilton acabó la jornada undécimo, tres puestos por detrás de su compañero; a dos de 'Checo', que se inscribió noveno en la tabla de tiempos, a nueve décimas y media de Leclerc. Del que se quedó a ocho el cuádruple campeón mundial alemán Sebastian Vettel (Aston Martin), que el jueves anunció que se retira de la F1 cuando acabe la temporada; y que firmó el séptimo crono este viernes.
El tercer entrenamiento libre se disputará este sábado, horas antes de la calificación, que ordenará la parrilla de salida de la carrera del domingo. Prevista a 70 vueltas, para completar un recorrido de 306,6 kilómetros.
En el último ensayo todos podrán calibrar muchísimas cosas, con miras a la cronometrada principal, que será clave en el devenir del Gran Premio. Más aún, en una jornada en la que las previsiones meteorológicas dan un ochenta por ciento de probabilidades de lluvia.
Automovilismo
Más noticias
Ferrari respira en Hungría
El monegasco Charles Leclerc (Ferrari) dominó este viernes la jornada de entrenamientos libres para el Gran Premio de Hungría, el decimotercero del Mundial de Fórmula Uno, en el que su escudería, para la que marcó el mejor tiempo en el primer ensayo Carlos Sainz -tercero al final-, pareció recuperar el pulso.