En documentos publicados este jueves por la Administración Nacional para la Seguridad en la Carretera (NTHSA) de Estados Unidos, la compañía dijo que a fecha del 31 de enero no tenía constancia de "accidentes, lesiones o muertes" provocadas por el defecto.
Los documentos también revelan que fue un instituto surcoreano quien comunicó a Tesla el pasado 6 de enero la existencia del defecto.
Tras la advertencia del Instituto de Pruebas e Investigación del Automóvil de Corea del Sur (KATRI), los técnicos de Tesla verificaron el problema.
Este defecto afecta a los modelos 3 2017-2022, S 2021-2022, X 2021-2022 así como Y 2020-2022.
El problema se centra en el software que controla la activación de la señal sonora de aviso y se produce cuando el conductor interrumpe el mensaje sonoro, por ejemplo al abandonar el vehículo mientras éste se encuentra activado. En esas circunstancias, el software registra que ya avisó al conductor y no repite la advertencia sonora.
Pero Tesla también indicó que la señal sonora sí se activa cuando el vehículo excede los 22 kilómetros por hora y el cinturón de seguridad del conductor no está abrochado.
Tesla señaló a NTHSA que para solucionar el problema actualizará el software de forma remota en todos los vehículos afectados y que notificará a los propietarios por correo el próximo 1 de abril.