Con la participación de representantes del sector de Alemania y varios países de América (México, Estados Unidos, Canadá, Chile y Argentina) y el apoyo de la organización Iniciativa Climática de México (ICM); la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de este país (Semarnat) y la agencia de Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable en México (GIZ México).
Flotas verdes: Transporte de carga ecológico, crucial en la lucha climática México, Estados Unidos, Canadá, Chile y Argentina) y el apoyo de la organización Iniciativa Climática de México (ICM); la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de este país (Semarnat) y la agencia de Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable en México (GIZ México).
La inauguración de este evento estuvo a cargo del doctor Adrián Fernández, director Ejecutivo de Iniciativa Climática de México; el maestro Tonatiuh Herrera Gutiérrez, subsecretario de Fomento y Normatividad Ambiental de Semarnat; y Dennis Quennet, director del Programa Ciudades y Transporte Sustentable de GIZ México.
Durante su participación El Maestro Herrera Gutiérrez, señaló que el transporte de carga es un tema estratégico para la economía del país porque constituye un poco más de la mitad del transporte nacional. Indicó que es de gran relevancia ya que, de acuerdo con el Inventario Nacional de Emisiones de México 2016, del total de emisiones de vehículos automotores, el transporte pesado es el responsable del 40 por ciento de las emisiones de óxido de nitrógeno; del 80 por ciento de las partículas PM2.5 (nitratos y sulfatos) y que representa una fuente significativa de emisiones contaminantes que impactan la salud pública y el medio ambiente. Añadió que el transporte pesado contribuye con el 24 por ciento del total de emisiones de partículas de carbono, lo cual es un contaminante climático de vida corta, con alto potencial de calentamiento global.
Mencionó asimismo algunas acciones que lleva a cabo actualmente la institución para atender los impactos del transporte de carga en el medio ambiente, como cambios al marco normativo de emisiones y el programa de Transporte Limpio, para disminuir los impactos ambientales y mejorar los combustibles y agregó que es necesario contar con una estrategia a largo plazo que fortalezca el compromiso de México, enfocada en los mecanismos regulatorios y financieros. También subrayó la importancia del congreso Flotas Verdes, por el intercambio de experiencias y la búsqueda de sinergias entre países y actores que ayudan a profesionalizar al sector del transporte de carga en nuestro país.
Por su parte, el doctor Fernández, destacó los co-beneficios que pueden traer las acciones enfocadas a disminuir el impacto en el medio ambiente del transporte de carga y puntualizó que las estrategias de flotas verdes son de las principales acciones que se pueden implementar en México para disminuir emisiones contaminantes y cumplir con las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDCs): “El evento de Flotas Verdes es evidencia de que se puede trabajar de forma propositiva y colaborativa entre gobierno, sociedad civil, agencias de cooperación y sector privado”, dijo.
Agradeció la participación de los representantes de GIZ y Semarnat y subrayó que la promoción de diferentes programas de flotas verdes es oportuno e indispensable ya que pocas medidas como este congreso reportan beneficios tan importantes, pues el avance que el país pueda tener en la reducción de contaminantes por transporte de carga verde es una de las 10 medidas que México puede incluir en el portafolio selecto de acciones implementadas para reportar a nivel internacional para el cumplimiento de las metas del Acuerdo de París.
Durante su intervención, el maestro Dennis Quennet, manifestó que la transformación del sector transporte de carga es un reto mundial. Añadió que el transporte de carga es crucial para el desarrollo económico y que cada vez existe más cooperación entre las partes involucradas.
El representante de GIZ, institución que trabaja por encargo del Ministerio Federal Alemán de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ), recalcó además que para la transformación de este tipo de transporte no hay soluciones fáciles puesto que el transporte de carga es diferente a otros tipos de transporte y que no todas las alternativas funcionan en todos los países por lo que no hay que crear soluciones si no se hace de manera conjunta. “México -dijo- requiere innovación y tecnología y necesita también un marco político regulatorio y normativo que permita su transformación hacia el futuro”.
El congreso contó durante su primer día, con la conferencia magistral “Los retos del transporte hacia la sustentabilidad”, impartida por el ingeniero Eduardo Olivares Lechuga, director de Proyectos Estratégicos del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) y de la doctora Marie Colson, Directora del Institute for Energy and Environmental Research Heidelberg (IFEU).
Olivares Lechuga comentó que a nivel mundial, el sector transporte representa el 25% de las emisiones de GEI, con tasas de crecimiento anual de 2.5 por ciento y mostró datos en los que el transporte de carga en México es responsable de 10 millones de toneladas de emisiones de carbono negro anualmente. Subrayó que entre las medidas de mitigación climática necesarias están la realización de cambios modales, acelerar la penetración de energías limpias y publicar una norma de emisiones de eficiencia energética.
Marie Colson, por su parte informó que en Alemania, el transporte de carga es una estrategia importante para la protección ambiental y la lucha contra el cambio climático y que entre las acciones que ha tomado el gobierno alemán, están también el impuesto sobre el carbono para los combustibles fósiles, apoyo a la e-movilidad, desarrollo de la infraestructura de carga, expansión del transporte público y del ferrocarril y estrategia de hidrógeno para la aviación. Mencionó un ejemplo de actuación en el ámbito del transporte de mercancías en experimentación: la e-highway, en la que los camiones que circulan tienen baterías y pantógrafos que alcanzan cables aéreos. Todos los proyectos, incluido el ejemplo de e-highway, toman en cuenta aspectos económicos, ecológicos y psicológicos, así como cuestiones relacionadas con el tráfico y la energía, señaló.