El centro mundial de investigación y desarrollo de la marca también albergará la mayor infraestructura de cargadores de alta potencia de Brasil, con diferentes modelos, para apoyar toda esta innovación.
Corazón del ensamblaje eléctrico, el e-Shop es el espacio de VW donde los vehículos reciben baterías y se encienden por primera vez para ser encendidos, siguiendo todos los protocolos de seguridad más estrictos. Antes de llegar allí, los modelos e-Delivery nacen en la misma línea de montaje que el portafolio diesel para una máxima eficiencia de la unidad de fabricación y beneficiándose del alto estándar de calidad ya establecido en el proceso VWCO y que es reconocido en el mercado.
Las modernizaciones en todos los puestos de trabajo garantizan la última tecnología en su fabricación, con una precisión superior y trazabilidad en los procesos. Cada etapa fue repensada para una mayor productividad: en el premontaje de motores, por ejemplo, ahora se consolidan los sistemas auxiliares. El componente de tracción va directamente al borde de la línea para reducir la complejidad.
También por primera vez, la suspensión neumática se instala de fábrica. Al final de todos los montajes, VW Camiones y Autobuses somete el vehículo a nuevas aprobaciones específicas para camiones de alta tensión, además de las mismas pruebas de calidad a las que se someten todos los demás productos antes de ser entregados al cliente con la garantía del estándar Volkswagen.
Durante todo el desarrollo, la ingeniería simultanea dominó el proceso de planificación de la fabricación y la logística con este grado de sinergia. Esto permitió la inserción de tecnología eléctrica en el portafolio de VWCO y una adición de solo mil metros cuadrados a su área construida.
La fabricación del e-Delivery también se beneficia de todas las ganancias de la industria 4.0 agregadas por VW Camiones y Autobuses en su proceso desde el lanzamiento de la nueva línea Delivery, que tiene un nivel de automatización del 60 por ciento en el armado de su cabina. También predomina la tecnología de reconocimiento automático del vehículo, con un chip en cada vehículo para la programación de los robots.
Se trata de una tecnología de vanguardia, comparable a las líneas de producción más modernas de Europa. Todo el proceso fue diseñado para brindar flexibilidad e integración, lo que resultó en una gestión eficiente de esta fábrica inteligente.