Mercedes Benz paralizará sus actividades por doce días tanto en la planta de Sao Bernardo do Campo, en el estado de Sao Paulo, el más poblado de Brasil y el más afectado por la pandemia, como en la de Juiz de Fora, municipio en el estado de Minas Gerais.
El fabricante alemán agregó que, tras los doce días de paralización, concederá vacaciones colectivas a diferentes grupos de empleados en las dos plantas con el fin de reducir la circulación de personas y, en consecuencia, la posibilidad de transmisión del virus.
"Nuestro objetivo, alineado con el del Sindicato de los Metalúrgicos, es contribuir para la reducción de la circulación de personas en este momento crítico en el país; administrar la dificultad de abastecimiento de piezas y componentes, y atender la petición de autoridades municipales para que anticipemos festivos", explicó Mercedes-Benz en un comunicado.
El anuncio se suma al similar hecho la semana pasada por la también multinacional Volkswagen, que decidió suspender su producción en las cuatro plantas que tiene en Brasil igualmente por 12 días, entre el 24 de marzo y el 4 de abril, ante el agravamiento de la pandemia.
La suspensión de la producción en las fabricantes de automóviles se produce en momentos en que Brasil, actualmente el país más castigado por la pandemia en el mundo, vive el peor momento de la crisis sanitaria.
El gigante latinoamericano registró este martes un récord de 3,251 muertes por la enfermedad, el mayor número para un día desde el inicio de la pandemia y con lo que el total de víctimas se ubicó en 298,676. El número de casos supera los 12.13 millones.
Estas cifras convierten a Brasil en el segundo país con más víctimas y casos de la enfermedad en el mundo desde el comienzo de la pandemia, superado tan sólo por Estados Unidos.