Schumacher, que cumplió 51 años el último 3 de enero, ya se sometió a un tratamiento médico el año pasado en París de la mano del cirujano especializado en cirugía coronaria Philippe Menasché, quien, según el medio citado, en noticia recogida por varios diarios italianos e internacionales, volverá a encargarse de la operación.
El objetivo de la intervención, asegura Menasché, es "regenerar el sistema nervioso central" de Schumacher, sobre cuyas condiciones de salud suelen salir muy pocas informaciones por voluntad de sus familiares.
En declaraciones publicadas por "Contro Copertina", el neurocirujano italiano Nicola Acciari aseguró que Schumacher sufre atrofia muscular y osteoporosis a causa de la imposibilidad de realizar actividad física.
La salud de Schumacher es asunto privado, por fuerte que haya sido la presión mediática en estos seis años y medio, especialmente en las semanas siguientes al accidente, cuando el aparcamiento de la clínica de Grenoble (Francia) donde se le trataba se convirtió en un plató televisivo para medios de todo el mundo.
Schumacher despertó del coma seis meses después del accidente. De la clínica fue trasladado a un centro de rehabilitación en Lausana (Suiza) y de ahí al chalet familiar de Gland, acondicionado por la mujer del piloto, Corinna Betsch, para brindarle la atención que precisa.