En su "Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2019", presentado en Santiago de Chile este miércoles, la Cepal atribuye la desaceleración regional a "un debilitamiento sincronizado de la economía global, lo que ha implicado un escenario internacional desfavorable para la región".
En este sentido, la Cepal, en una simulación preliminar, calculó que la guerra comercial que mantienen China y Estados Unidos ha tenido ya un impacto de en la región, debido a la reducción que ha supuesto para el comercio, del -6 por ciento en el primer trimestre de 2019.
En el ámbito interno, el organismo achacó la previsión del 0.5 por ciento "al poco dinamismo exhibido por la inversión, las exportaciones y a una caída del gasto público y del consumo privado".
"La región enfrenta un contexto externo con mayores incertidumbres y complejidades crecientes: menor dinamismo de la actividad económica mundial y del comercio global; mayor volatilidad y fragilidad financiera; cuestionamientos al sistema multilateral y un aumento en las tensiones geopolíticas", precisó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, durante la presentación del informe.
"Llevamos 5 años de desaceleración económica, este es un tema de enorme preocupación", subrayó.
América Latina "necesita apuntalar sus ingresos. Una forma de lograr una cuenta fiscal más estable y equilibrada es poder contener la evasión tributaria y los flujos financieros ilícitos porque eso supone una pérdida grande de ingresos", añadió la secretaria ejecutiva de la Cepal.
El 0.5 por ciento proyectado este miércoles se compara con el 1.3 por ciento proyectado el pasado abril para este año y es inferior al 0.9 por ciento que, según señaló Alicia Bárcena, fue el "crecimiento real" alcanzado por la región en 2018.
"En abril de 2019 éramos más optimistas pero el primer trimestre nos mostró que el camino era más pedregoso de lo esperado y entonces ahora la perspectiva está en 0.5 por ciento para la región", indicó Bárcena.
En el primer trimestre del año, la actividad económica en América Latina se contrajo un 0.1 por ciento interanual.
A diferencia de años anteriores, en 2019 la desaceleración será generalizada y afectará a 21 de los 33 países de América Latina y el Caribe, "y en 17 de 20 de América Latina", complementó Bárcena.
En promedio, se espera que América del Sur crezca un 0.2 por ciento, América Central un 2.9 por ciento y el Caribe un 2.1 por ciento.
Por países, Dominica liderará el crecimiento de la región, con un 9.9 por ciento, seguida por Antigua y Barbuda (5.9 por ciento) y República Dominicana (5.5 por ciento).
Panamá crecerá un 4.9 por ciento; Guyana un 4.6 por ciento y Bolivia un 4.0 por ciento y luego Perú lo hará al 3.2 por ciento, Colombia al 3.1 por ciento, Chile al 2.8 por ciento, México al 1 por ciento y Brasil al 0.8 por ciento.
Tres países cerrarán el año en rojo, según el informe: Argentina, con una contracción de -1.8 por ciento, Nicaragua (-5 por ciento) y Venezuela (-23 por ciento).
Los números rojos de Argentina y Venezuela, junto con las débiles proyecciones para Brasil y México se encuentran también en la base de esa reducción de la perspectiva regional hasta el 0.5 por ciento.
"Venezuela es una de las economías grandes de la región , una economía que pesa mucho en la región, y ese dato de crecimiento estimado en la región del 0.5 por ciento en realidad esta asociado a estas grandes economías: México, Brasil, Venezuela, Argentina... a las economías grandes de la región", dijo Bárcena.
La Cepal proyectó además un crecimiento mundial del 2.6 por ciento para 2019, 4 décimas menos que el observado en 2018, debilitamiento enmarcado en redundantes tensiones comerciales y problemas geopolíticos que ha derivado en un escenario internacional desfavorable para la región.
Entre las economías emergentes, China continuará su proceso de desaceleración gradual este año y se prevé que crezca un 6.2 por ciento, 4 décimas menos que en 2018 y su tasa más baja en casi 30 años.
Respecto de la guerra comercial, la Cepal calcula que a China "le va a costar, en términos del PIB, un 2.2 por ciento menos, y a Estados Unidos un 0.6 por ciento menos".